Si bien el Clausura 2019 está en una etapa tempranera, los resultados de Toluca y Cruz Azul no han sido los esperados para dos clubes cuya máxima premisa es estar en la parte alta de la tabla y pelear por el título.Cruz Azul, con ocho puntos en la novena posición de la tabla general, y Toluca, con siete unidades en el onceavo puesto, han tenido un flojo comienzo de campeonato que tiene a sus entrenadores, Pedro Caixinha y Hernán Cristante, en un cuestionamiento de resultados.Ambos clubes tuvieron una importante inversión en materia de fichajes que no han dado los dividendos deseados. En el caso de Cruz Azul, las lesiones han sido un martirio para el armado del equipo, mientras que Toluca el retraso de sus refuerzos han disminuido a un plantel que tiene demasiada expectativa.El problema escarlata es que dos triunfos y solamente un empate es un bagaje pobre para los Diablos. Peor aún es el panorama del Toluca pues el siguiente fin de semana tendrá que visitar al León, uno de los equipos con mejor rendimiento del fútbol mexicano.Mientras que en Cruz Azul las dudas giran en torno a los pobres números ofensivos y al nulo aporte hasta el momento de jugadores como Martín Cauteruccio, Milton Caraglio, Jonathan Rodríguez y Roberto Alvarado. Ningún gol entre ellos en Liga, solamente cuatro anotaciones marcados es un abismo numérico a la Máquina que apenas hace seis meses avasallaba en la Liga. Toluca tiene más presión que Cruz Azul. Tanto Caixinha como Cristante tienen una losa que, si quieren quitarse de encima, deben romper en la próxima jornada si no es que quieren entrar a esa rumorología que condena entrenadores a dejar su respectivo banquillo. Por lo pronto, los números son sumamente pobres para ambos clubes.